ahí se encuentra
en la soledad
con las rodillas
amalgamadas al
mentón
ella toma
su mano y resbalan
por el desfiladero
y caen
juntos
solo unos raspones
la caida
sigue siendo limpia
ya nadie llora
para adentro
ambos respiran
al otro
sus labios
muerden
mientras duermen
Justo en el clavo
Hace 4 años
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